Pero como se dice, las mejores conversaciones son en la
madrugada, pues es muy cierto, hay sinceridad y sobretodo cuando estamos
teniendo una conversación con nosotros mismos.
Tal vez es en ese instante en el cual nuestra imaginación se
eleva sin limite, aparecen sueños e ideas que pueden convertirse en una
realidad que puede ser de prosperidad; desde la idea de abrir un negocio o
hasta el simple hecho de resolver circunstancias.
Pero, mucho ojo, como esta
escrito: “Las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”, esto
aplica hasta para con nosotros mismos, por que no habrá peor critico o juez
contra nosotros que nosotros mismos.
Si vamos a tener ese momento de reflexión, que es bueno y
necesario, hay que tener una buena conversación, no ser críticos ni ver los
defectos, no ser negativos sino todo lo contrario como el apoyarnos y darnos
esas palabras de aliento que le diríamos a algún ser querido cuando buscamos e intentamos que
se anime y salga adelante.
Busquemos entonces tener una platica sana, ver nuestros puntos
débiles siempre y cuando sea para mejorar y cambiar, para madurar y tratar de
no cometer los mismos errores y de hacer que ese defecto que tanto nos molesta
o nos complica las cosas con los demás incluso hasta con nosotros mismos,
buscar desaparecerlo.
Claro que para tener una buena conversación y darnos el mejor de
los consejos hay que ser mas que cien por ciento sinceros con nosotros mismos,
no se cieguen y no traten de ocultar que algunos por mas o algunos por menos
nos mentimos en algo para justificarnos o por simple comodidad de no querer un
cambio.
Si lo que buscamos es tener un resultado diferente lo único que
hay que hacer es muy sencillo y por supuesto que ya lo habrán escuchado: hay
que hacer algo diferente; las cosas no caerán del cielo ni nos las brindaran en
bandeja de plata, hay que trabajar y no hay nada tan satisfactorio como lo es
el resultado de nuestro esfuerzo, de la lucha y trabajo. Solo hay que ser
pacientes pues lo que vale la pena no llega fácil.
Las noches pueden ser largas o cortas, depende de hasta donde nos
lleve la mente, solo hay que buscar estar bien y reflexionar, hay que
aprovechar cada instante cada segundo para buscar ser mejores personas; si
queremos un mundo diferente debemos empezar el cambio en nuestros hogares, no
solo sentarnos a quejarnos y quejarnos.
El quejarse no nos llevara a ningún
lugar, no busquemos quedar bien con todos; eso es simplemente imposible, hay que
buscar mejor quedar bien pero con nosotros mismos, mientras estemos en paz con
lo que hacemos o decimos no estaremos inquietos ni perturbados.
Todos en algún lapso en algún punto de nuestra vida necesitamos
estar solos, con eso logramos madurar un poco y avanzar uno de mil pasos en el
camino que hay que recorrer.
Claro que con esto no quiero decir que la soledad sea algo
que debamos abrazar, no hay que confundir, debemos aprovechar ese momento en el
cual necesitamos estar solos para reflexionar y aprender a amarnos a nosotros
mismos y al mismo tiempo conocernos; cómo buscamos salir adelante y triunfantes
o agradarles a los demás, si a nosotros no nos agradamos?, si no podemos estar
bien cinco minutos con nosotros mismos, cómo podemos estar bien o pasarla bien
con los demás?
Tampoco hay que abusar, la soledad es un arma de dos filos y hay
que tener mucho cuidado, no hay que abrazarla ni amarla; solo hay que sacarle
lo bueno y que sea un instante por que así como nos puede enseñar muchas cosas
y al mismo instante ayudar, también puede ser de mucho perjuicio para nosotros.
Una noche con café, disfrutando su sabor y sintiendo esa
tranquilidad de poder pasar un buen rato con nosotros mismos; y cuando ese café
se vacié de esa taza y acabe su efecto, entonces si, a dormir en una serenidad
deliciosa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario